En esta ocasión quiero hablarles acerca de la limpieza de las brochas, pinceles y esfuminos con los que aplicamos polvo, rubor o sombras.
Ya sea para uso profesional o personal se deben higienizar con mayor o menor frecuencia, pero es indispensable hacerlo ya que se van depositando restos de maquillaje, cremas y eso posibilita que se alojen
fácilmente bacterias.
Lo ideal es lavarlos con agua tibia y jabón líquido o shampoo neutro de buena calidad, respetar el sentido del pelo del pincel para evitar enredarlo y dejarlos secar sobre una toalla limpia, habiendo previamente retirado el exceso de agua.
No es recomendable aplicarles perfume o fragancia alguna, ya que puede provocar alergias en pieles sensibles.
Personalmente yo los sumerjo en alcohol rápidamente para desinfectarlos, luego de higienizarlos debidamente.
Espero que les haya sido de utilidad y lo pongan en práctica.
Hasta la próxima entrada.